LA ENCÍCLICA “PROGRE” DE UN PAPA INTELIGENTE…
En estos días de pandemia universal se hace más acuciante que nunca la necesidad de reflexión sobre las características y la calidad del paradigma social en el que se están desarrollando los acontecimientos.
Muy oportunamente, el Papa Francisco ha resumido en su reciente encíclica “Fratelli tutti” su criterio sobre los abusos a los que conduce el neoliberalismo financiero, condenando la “apropiación indebida” de los medios de producción, entre otras cosas…
Me parece muy positiva la posible influencia de la nueva encíclica sobre los católicos del mundo, que son teórica y aproximadamente una octava parte de la población del planeta. Pero para la gran mayoría restante vienen siendo históricamente los movimientos sociales "de izquierdas", no vinculados con mitologías religiosas, los precursores "malditos" de esas ahora piadosas reflexiones…
El actual líder de la ICAR trata de actualizarla, a remolque de los avances sociales que han estado maldiciendo hasta el Concilio Vaticano II (con una doctrinaria recaída durante los dos papados anteriores al presente). Eso es bueno; pero la curia vaticana intuye, no sin razón, que el final de ese trayecto puede ser la postergación de las "creencias" dogmáticas, sin las que lo esencialmente "suyo" podría diluirse progresivamente…
Me parece evidente que los humanos somos un proyecto en fase de desarrollo y que la voluntad de dominio ha sido siempre una característica humana, a menudo muy manifiesta y frecuentemente también encubierta.
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